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Como dije en la entrada en la que presenté este personaje (he cambiado algunas cosilla de él con respecto al primer diseño. Este me gusta más.), Vaghlayar no aparecerá hasta el episodio cinco de la novela. En concreto, el capítulo septimo del primer episodio del libro segundo (ya expliqué que cambié el guión de la novela).
Le presenté como la cabeza de un grupo paramilitar de Nútelis. He modificado ese aspecto (todavía me queda algo más del doble de lo escrito para presentarle. Sigue siendo el lider, pero ahora de una red de grupos rebeldes que lucha contra el poder establecido en los diferentes países que están bajo el influjo de las dos superpotencias Nutelis y Nuenia. Los rebeldes, que no tenían relación alguna entre si, eran anteriores a su aparición pública, pero él les aglutinó en un mismo grupo de presión. Son considerados terroristas por sus tácticas de guerra de guerrillas. Todavía estoy barajando el nombre (Aguilás de -nombre del país donde se hubique la célula de la red-, Capas Negras...). No soy bueno con los nombres. La idea es que tengan un símbolo aglutinador.
Cuando dibujé el boceto a lápiz no me acordé del espacio del papel. Me di cuenta demasiado tarde de que quería añadirle un sombrero de ala ancha como los del siglo XVII. Así que como lo principal es la máscara y sus dibujos, le presento sin el sombrero. Aunque seguro que estará más elegante con sombrero.
Tiene toda la cabeza cubierta, sin dejar ni un atisvo de su piel al aire. Nadie sabe quién es en realidad. La máscara le distorsiona la voz y jamás se la ha quitado delante de nadie. El hecho de que se fien de él es debido por su enorme carisma unido a su gran habilidad estratega y de combate (como expresé, algunas sencillamente serían sobrehumanas, o esa es la idea).
Su firma es la golondrina que véis en el sello de abajo. Ese símbolo es un agravio contra el general Semaren, su némesis, el cual detesta que lo llamen así. Vaghlayar lo sabe, y por eso lo usa. He querido hacer un pequeño pico en el velo que cubre la cabeza por esa misma razón. Con sombrero no creo que se vea mucho.
Su carácter es afable, educuado, sarcático e irónico. La típica persona que tiene la frase deseada en el momento oportuno. O son los tonos que quiero que tenga. Tal vez cambién una o dos cosas hasta que llegue a su presentación en mi redacción.
Esta ilustración es sin duda la que más tiempo me habrá llevado de todas... Sin embargo creo que el resultado es bueno (tal vez el mejor hasta ahora), por lo que ha merecido la pena el esfuerzo.
